El Banco Central de Bolivia (BCB) ha comprado cerca de 11 toneladas de oro en lo que va de 2024, como parte de una estrategia para fortalecer las Reservas Internacionales (RIN) del país. Esta iniciativa, respaldada por la Ley 1503 promulgada en mayo de 2023, tiene como objetivo incrementar las reservas mediante la adquisición de oro del mercado interno.
El presidente del BCB, Edwin Rojas, informó que, hasta finales de octubre, la institución adquirió 10.83 toneladas de oro, manteniendo un promedio de compra mensual superior a una tonelada. Estas compras representan un paso importante para consolidar la estabilidad económica de Bolivia en un contexto de fluctuaciones internacionales en los mercados de materias primas.
Ley 1503: Estructura y propósito
La Ley 1503 otorga al BCB la facultad de adquirir oro nacional y emplearlo tanto para fortalecer las reservas como para realizar operaciones financieras en mercados externos. Para estas compras, el BCB utiliza moneda nacional, ajustando el pago de acuerdo con el precio internacional del oro. Desde la promulgación de la ley en 2023, el banco ha acumulado un total de 14.92 toneladas de oro.
Rojas destacó que el BCB ha implementado un proceso sistemático para la compra, acopio y refinación del oro en Bolivia. Este proceso incluye la obtención de “oro de buena entrega”, que cumple con los estándares de pureza requeridos para su monetización y uso en transacciones internacionales.
Impacto en las reservas internacionales
Las Reservas Internacionales Netas de Bolivia alcanzaron los $us 1,970 millones al 7 de noviembre de 2024, registrando un aumento de $us 262 millones en comparación con el cierre de 2023. De este total, $us 1,914 millones corresponden a oro, lo que representa más de 22 toneladas. El resto de las reservas se divide en $us 121 millones en divisas y $us 40 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG) y Tramo de Reservas.
El aumento en las reservas de oro es significativo, dado que refuerza la posición financiera del país y proporciona un respaldo en un activo considerado seguro ante las incertidumbres de los mercados globales. Este enfoque en el oro como pilar de las reservas refleja una estrategia para reducir la dependencia de las reservas en divisas y ofrecer mayor estabilidad a la economía boliviana.