El director Ejecutivo de la Autoridad de Bosques y Tierras (ABT), Omar Quiroga, informó este miércoles que el total de la superficie quemada en los incendios forestales hasta el 30 de agosto es de 443 mil hectáreas (ha) en Bolivia, lo que representa el 10% de toda la superficie afectada por el fuego en 2022.
“Al 30 de agosto, la cantidad de superficie quemada hasta ahora está en 10% de lo que se había quemado el año pasado, cuando se registró 4,4 millones de hectáreas”, explicó a Radio Expresión de Santa Cruz.
De este total de superficie quemada, el 53% están en Beni y el 22% en Santa Cruz.
En Beni se registraron 235.613 hectáreas, que representan el 53,1% de la superficie quemada, en su mayoría pastizales.
En Santa Cruz fueron afectadas 95.879 ha (21,6%), seguida de La Paz con 62.903 ha (14,2%), Cochabamba cona 21.497 ha (4,8%); Tarija con 17.311 ha (3,9%); Chuquisaca con 5.243 ha (1,2%); Pando con 4.382 ha (1%), y Potosí con 477 ha (0,1%).
Quiroga recordó que en 2019 se quemaron 1,8 millones ha de bosque, de las cuales 5,3 millones ha fueron afectadas por los incendios. El resto fue pastizales y arbustos.
En 2022 el fuego afectó 800 mil ha de bosque. “Es un resultado que debemos resaltar porque el bosque alberga una biodiversidad, y el pastizal puede regenerar la vegetación”, sostuvo.
En lo que va de esta gestión no se generaron incendios en lugares donde se producen alimentos y habita el ganado vacuno. Sin embargo, sí se afectó a las áreas protegidas.
Quiroga explicó que la reducción de superficie quemada se debió a la ejecución de la Estrategia de prevención, control y combate a los incendios forestales, que incluye las caravanas de socialización que se hizo en las zonas susceptibles a incendios en Beni y Santa Cruz, y al trabajo coordinado con otras entidades como las Fuerzas Armadas, gobernaciones y municipios.